Es un jarrón particular, antes de ser exhibido en la sala de exposición, estuvo durante 6 meses en la casa del artesano que lo creó. Durante este período, alcanzó su máxima elegancia al albergar en su interior un ramo de hortensias secas; el resultado fue un jarrón muy elegante y distintivo para tener en casa, en una zona donde la luz del sol puede resaltar la textura del material dejada al natural durante el torneado. Su característica distintiva son las secciones circulares decorativas, creadas con un aerógrafo, y las manchas en la parte superior del borde.